Perdiste la vida, el puñal
fino y desnudo de tu amor,
las hojas secas
que flotaban sobre el agua negra de la leyenda.
Ganaste
las mariposas del aliento,
nuevas semillas luchando
contra tu olvido con su vida,
un parque
donde las copas de los pinos convocan
bajo tu nombre una firme esperanza.
